domingo, mayo 04, 2008

Como han pasado los años...

5 de mayo de 2004...
Aún recuerdo a detalle cada momento de ese miércoles en particular. De hecho las últimas semanas previas a esa fecha todavía están atrapadas en la memoria. Corrección tras corrección. Revisión tras revisión. Pelearse con word. Ajustar bibliografías. La paranoia del engargolado en Lumen de Copilco a las 11 de la noche. El no querer comer nada en ese día dado el enjambre que vivía en mi estómago. Minutos antes, estar en un salón al lado del aula donde defendería mi trabajo fumando como desquiciada mientra leía sistemáticamente mi texto. Yorch y Mauricio quitándome mi presentación de las manos insistiéndome "A ver guey, tú escribiste esto, deja de tratar de memorizarlo porque sabes perfectamente qué dice"...
El momento de la verdad cuando las piernas flaqueaban. Argumentos. Afirmaciones. Polémicas.
Y la estúpida satisfacción que se experimenta cuando tras un tiempo de debate y análisis, por fin te dicen que tu trabajo ha sido aprobado.
Todavía sonrío cuando recuerdo otra frase que me dijo Yorch esa vez cuando salimos del aula"Estás cabrona, no tartamudeaste ni te equivocaste ni una sola vez" Me mantuve ante todo y pude defender algo que me costó muchos meses de trabajo, investigación y horas esclavizada a la computadora.
Si, hace 4 años me titulé. Y lo más curioso es que no puedo negar que días después a esa fecha, caí en conciencia de que tenía que crecer. Ser adulto, trabajar, mantenerme, asumir nuevas responsabilidades. Caí en pánico, y de qué modo. ¿Qué sería de mí? me preguntaba cada día. Empezar a buscar trabajo, temor al cambio, a lo que vendría...
En una borrachera posterior a esa fecha, un amigo muy querido me dijo algo que aún con todas las cervezas que recorrían mis neuronas, puedo recordar: Que años después me parecería absurdo el tener ese miedo, y que por el contrario vendrían cosas mejores. Sí, es una frase de lugar común, pero en parte tenía razón.
Y todo viene a raiz de un par de cuestiones que se presentaron en sincronicidad: pláticas, recuerdos, circunstancias, todo aderezado con una fecha cercana. He aprendido que por lo menos en mi caso, debo prestarle atención a esos pequeños pero trascendentales detalles.
Disfruté mucho mis años de universitaria, pero no voy a negar que estos últimos años, con todo y sus claroscuros, han sido mucho mejores. He aprendido a disfrutar quién soy y porque estoy aquí. Todo lo que viví en un momento determinado ha sido trascendente para ser quien soy en este instante de mi vida. Me he reencontrado con el delicioso encanto de mi libertad. Asumí mi cambio de religión aún contra todos los comentarios encontrados. He disfrutado mi soltería sin tapujos ni condicionamientos. Tengo un trabajo que me gusta y en el que he permanecido por más de 3 años y medio, aun con todos los cambios, altibajos y encontronazos. Recuperé mi lado gótico y existencialista. He conocido gente que ha sido trascendental en mi propia vida. Y conste no sólo hablo de los que son y serán amigos siempre, sino también de aquellos que son nemesis de todos mis principios.
En mi entorno ha habido también un sinnúmero de modificaciones. Personas que se van y algunas que regresan. Amigos que se casan, otros que se divorcian. Muerte y vida. Matices de antaños y nuevos horizontes.
Simplemente, cai en conciencia que hoy hace cuatro años, se cerró un episodio de mi vida para dar paso a un cápitulo de diferente intensidad en mi existencia. Pero aparte he enfrentado muchas situaciones trascendentales en estos cuatro años. Hace poco más de medio año quizá fue una de las más agresivas pero que han logrado fortalecer mi esencia. La que me permite poder escribir estas líneas evocando tiempos de aquella adolescente que ansiaba ser periodista y que hoy aunque no vive bajo ese sendero, esta orgullosa del camino que ha tomado su vida. A final de cuentas mi atmósfera siguen siendo los medios de comunicación, y aunque las palabras impresas no son mi vocación en este momento , aun me queda este blog, para compartir mis pensamientos.
Bien lo dice uno de mis guias, todo será a su tiempo.

1 comentario:

Braindrainer dijo...

buen blog.
te agrego a mis links.

saludos.